Tamy, la perrita que fue clave en la rehabilitación inclusiva de Neider Parra

Es ágil, cariñosa, obediente, bastante activa y muy feliz con su familia adoptiva. Pero más que una mascota o incluso como un miembro de la familia, Tamy la perrita labrador dorada de siete años se convirtió en el ángel de la guarda del veterano de 25 años de la Policía, Neider Parra, en su proceso de rehabilitación inclusiva, luego de caer en una mina antipersonal.

“En mi proceso de rehabilitación ella ha sido fundamental en la parte emocional y psicológica, se convirtió en un gran apoyo y me hace muy feliz verla correr, compartir con su nueva familia, el amor que ella me brinda. Agradezco mucho a las personas que hicieron posible que ella estuviera conmigo”, dijo Neider.

Sin embargo, la inspiración en que se ha convertido Tamy para Parra viene desde años atrás, cuando el joven soñador inició su carrera en la Policía Nacional en el 2017 e hizo parte de la Dirección Antinarcóticos. Allí fue como un amor a primera vista, Tamy se convirtió en su compañera y confidente en zonas apartadas, lejos de su familia.

“Tamy era mis ojos y pies en esas zonas boscosas, pues percibe cosas que uno a simple vista no puede detectar. Tamy era parte de la familia de ese grupo de policías que hacíamos esos patrullajes (…) Por eso en mi etapa de recuperación anhelé tener a Tamy, quise que ella no trabajara más en esa labor tan riesgosa”, afirmó.

El hecho fatídico ocurrió el 26 de febrero del 2019 en una operación en Tumaco, Nariño, de erradicación de cultivos ilícitos, “como guía canino caigo en un campo minado con tres detonaciones, en el que caímos once uniformados, dos de ellos murieron. Ahí perdí mis dos extremidades inferiores y otras partes de mi cuerpo”.

Relata Neider que apenas aconteció la explosión del campo minado preguntó a sus auxiliadores por Tamy, que afortunadamente salió ilesa. Sin embargo, su proceso de adopción no fue tan fácil, pero gracias a la mamá de Neider y una coronel de la Policía, su más anhelado regalo le fue entregado en la clínica donde hizo su recuperación. 

De otro lado, Parra, quien es bogotano y vive con sus hermanas y padres, también encontró en el deporte su otro motor para sobrevivir a las consecuencias físicas y psíquicas del atentado que sufrió. 

“El deporte se ha convertido en ese motor adicional en mi proceso de rehabilitación, me hace sentir libre, me aparta de la realidad y dejo momentáneamente atrás esos episodios tristes y traumáticos, además me hace sentir una persona muy capaz e independiente”.

Neider hace parte de los 20 clasificados a los Juegos Invictus que se llevarán a cabo en septiembre próximo en Alemania, donde representará a Colombia en paranatación, paracycling y powerlifting.

Actualmente entrena varias horas al día en la Dirección de Veteranos y Rehabilitación Inclusiva, DIVRI, espacio en el que ha hecho su rehabilitación inclusiva.